A
veces oigo decir aquello de que la poesía
le
ha salvado la vida a este o aquel, no me lo creo.
La
poesía no es un salvavidas,
es
un desprendimiento,
una
responsabilidad social o
un
acto de respeto hacia uno mismo y los otros,
a
veces la necesidad de poner en palabras
los
desvaríos emocionales.
Pero
salvar más bien salva poco, quizás
opera
como un tratamiento terapéutico.
Escribir
un rato cada día, no para publicar,
sino
para estar con nosotros mismos.
Sabemos
que estamos aquí o allí,
que
no estamos solos y que todo está interrelacionado,
también
sabemos que ineludiblemente
un
día acabará nuestra vida
y
mientras tanto…escribimos.
Félix Menkar
(poemas descolocados)
No hay comentarios:
Publicar un comentario