Rescato de un cajón un poema mío de hace casi 32 años.....sin acritud
Lo
cotidiano
Una habitación da a un balcón,
en la barandilla está apoyado un
hombre,
redactor de una revista insulsa
y moderna
que defiende orgullosamente lo
cotidiano.
Es un mitificador coqueto y
progre,
portavoz barbudo del movimiento
gay,
sus dioses de cabecera son
Visconti y Pasolini,
sobre su escritorio descansan
varias plumas coloreadas.
Esta mañana flirtea con un joven
de cabellos rubios
en animada charla sobre la
contracultura hispana
mientras le devora con los ojos,
le traiciona el deseo.
El hombre culto y progre acaba
de recibir una oferta
para coordinar el Área de
Joventut y Cultura
del ayuntamiento local, un
puesto adecuado
a los nuevos tiempos y las
nuevas modas,
por la tarde lo celebrará riendo
vehemente
en algún bar de mariquitas de la
parte alta de la ciudad
y se retirará no muy tarde a su
apartamento
cercano a la discoteca Bocacció,
ese otrora
templo y nido de poetas y
escritores novísimos.
Este prohombre dice ser
anarquista,
gustarle el Ajoblanco y ser
profeta de lo cotidiano.
Félix Menkar, abril 1982
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